Blatter asegura que la Copa Confederaciones no se cancelará pese a las violentas manifestaciones presentadas en Brasil
La FIFAaseguró que no contempla cancelar la Copa Confederaciones debido a las violentas protestas que ocurren en Brasil.
Cerca de un millón de personas salieron a las calles en más de 80 ciudades el jueves por la noche para protestar contra el gobierno, al que acusan de corrupción, de no invertir en los servicios públicos y de los altos precios.
La policía lanzó gases lacrimógenos y disparó balas de goma en Río de Janeiro, donde más de 300 mil personas protestaron en la ciudad donde el jueves jugaron España y Tahití, y que será la sede de la final de la Confederaciones el 30 de junio.
Pero la FIFA asegura que la Copa no peligra.
"Ni la FIFA ni el COL (comité organizador local) han siquiera discutido la posibilidad" de cancelar el torneo que sirve como ensayo para el Mundial de 2014, indicó la FIFA en un comunicado enviado a la AP. "Ni la FIFA ni los organizadores locales hay hablado de esa posibilidad".
Las protestas más grandes se produjeron en Río de Janeiro, donde más de 300 mil personas salieron a la calle y fueron reprimidas con balas de goma y gases lacrimógenos.
Las protestas son frecuentes en Brasil, un país de 190 millones de habitantes, pero nunca se habían visto manifestaciones tan grandes e intensas como las de la última semana.
Comenzaron como protestas contra los aumentos en las tarifas de autobuses y trenes subterráneos, pero se fueron ampliando y ahora hay todo tipo de denuncias. En varias ocasiones la policía reprimió las manifestaciones por la fuerza y hubo enfrentamientos.
Una de las quejas más comunes es por la inversión de miles de millones de dólares en estadios con miras al Mundial del año que viene y los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro del 2016.
El gobierno proyecta invertir 13 mil 300 millones de dólares en estadios, renovaciones de aeropuertos y otros proyectos relacionados con la Copa Mundial.
"Queremos hospitales y escuelas entre los requisitos de la FIFA", decía un cartel en las afueras del Estadio Maracaná de Río el jueves, antes del partido de España con Tahití.
El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, ha exhortado a los manifestantes a "no usar el futbol para promover sus demandas".
Blatter se fue de Brasil en plena Copa Confederaciones la semana pasada para asistir al Mundial Sub 20 de Turquía. Se lo espera de vuelta la semana que viene para las semifinales y la Final.